El fin de semana de los Templis.
¡Hola a todos de nuevo! ¿Cómo estáis?
Hoy es el día de traer una entrada de verdad y aunque me gustaría haberla puesto muchísimo antes, el tiempo no me lo ha permitido. Así que, espero que me perdonéis.
Quería haberla puesto antes para que no hubiera tanto desfase entre lo que os contaba y cuándo había sucedido, pero la vida es así, qué le vamos a hacer.
Hoy os quiero contar un poquito el fin de semana de la Entrega de los Templis. En mi otro blog ya os conté como Luna me había dado la sorpresa de que venía fugazmente a Madrid porque su libro estaba nominado para recibir uno de dichos premios. Pues en esta nueva entrada os cuento todo lo que sucedió durante esos días.
La entrega era el 20 de febrero, viernes, y Luna llegaba a la hora de comer a Madrid, y como ya es costumbre en nosotras pues, no tuvimos que pensar demasiado donde comer: Tommy Mel's era el sitio elegido. Nos gusta el sitio y tenemos ya hasta nuestros platos preferidos, además como la entrega era a las 18:30 no podías perder mucho tiempo decidiendo donde ir.
Cuando terminamos de comer nos encaminamos hacia la Fnac de Callao que es donde se vienen celebrando dichos premios. Esta "gala" la organiza una revista online llamada "El Templo de las Mil Puertas", quizá muchos la conozcáis ya, yo la descubrí ese mismo día. He de decir que con Luna estoy descubriendo una de cosas relacionadas con la literatura que jamás hubiera ni siquiera imaginado. Y sabéis, hay algo que me gusta de la página de esa revista. Su recomendador. Probadlo cuando no sepáis que libro leer, creo que es muy útil.
Entramos a la Fnac y nos fuimos al lugar donde se celebraban, y bueno, tengo que daros una buena noticia, el libro de mi amiga "Alianzas: Cuentos de la Luna llena" ganó el premio de libro juvenil de saga nacional. Imaginad lo contenta que estaba Luna, y lo nerviosa que estaba yo, que no sé por qué pero empatizo que da gusto con sus cosas.
El sábado fue un día mucho más relajado, ya no había nervios de ninguna clase ni sitios a los que tuviéramos que ir con la hora fijada. Nos dedicamos a disfrutar de Madrid y de todo lo que esconde.
Fuimos a una papelería que tenía fichada por internet y que si no la conocéis deberíais ir. Aunque claro, sed conscientes de que no podréis salir de allí sin llevaros algo. Avisado queda. La papelería en cuestión se llama: Soufflé Madrid, y tiene cosas tan bonitas como:
Y cargamos, claramente. En otra entrada os enseñaré las cosas tan bonitas que me llevé conmigo.
Fuimos a comer a Ginos, porque Madrid estaba lleno de gente, y aunque nuestra idea era descubrir algún sitio nuevo para comer, finalmente desistimos, porque se acercaban las cinco de la tarde y nos veíamos comiendo un bocadillo que sustituyera comida y merienda.
He de decir que el plato de lunette con salsa de trufa que han puesto nuevo está para morirse y querer robar la receta, así os lo digo. Lo recomiendo muy mucho, Luna también lo hace con su pizza de peperoni. Eso sí, abstenerse aquellos a los que el picante les eche para atrás.
Seguimos paseando por Madrid y llegamos a un sitio que llevaba apuntado en mi libreta de lugares que enseñar a Luna, porque aunque solo sea ir a verlo ya merece la pena, pues los precios son un poquito altos. Aunque nosotras comprados dos caramelitos. Me estoy refiriendo a: Le Cure Gourmande. Es un sitio espectacular, parece que entras a una tienda en mitad de París.
Y para terminar el fin de semana nos acercamos a tomar un té a Happy Day Bakery, como no podía ser de otra manera y estando en el blog en el que estamos, aunque en realidad íbamos a otro sitio a comer crepes, pero era tan pequeñito que fue imposible coger mesa, una pena la verdad y quizá por eso, el sitio donde tomamos té no me emocionó tanto, sobre todo porque la tarta de oreo estaba muy reseca. Eso sí, los tés estaban muy buenos, el mío era de miel y realmente sabía a ella.
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