Llevo unos cuantos días (o meses, según se mire) pensando en que algo no funciona en el blog. Y es que noto que he perdido mi esencia co...

Repensando el blog.

21:03 Aran 2 Comments


Llevo unos cuantos días (o meses, según se mire) pensando en que algo no funciona en el blog. Y es que noto que he perdido mi esencia con tanto cambio de blog y tanto querer hacer cosas distintas. Porque antes, me era mucho más fácil pasar por aquí y escribir algo; ahora me cuesta mucho, y es por el cambio que hice al abrir este nuevo blog. 

Por todo ello creo que voy a volver, más o menos, a como llevaba el primer blog que tuve. Es decir, más experiencias del día a día, y menos cosas de diseño. Ojo, con esto no digo que de vez en cuando, esté aburrida y me dé por crear algunas tarjetitas monas o algún calendario, una cosa no quita la otra. Pero pienso que es mejor volver a encauzar el blog por el otro camino, al menos, porque yo me sentía más cómoda así. Por eso, y porque no me apetece cerrar este y abrir otro. No quiero volveos la cabeza loca. 

Así que me quedo en este, pero seguramente contando más cosas de mi día a día, escritos, filosofando, en lugar de tanto diseño gráfico. Al menos de momento, porque no me da tiempo ahora a ponerme con tranquilidad delante de photoshop y hacer cosas trabajosas, quizá más adelante, y cuando no tenga que dedicarle más de la mitad de mi vida al doctorado. 

Seguramente regrese pronto con una entrada - resumen de mi viaje en solitario para un curso de verano a Benalmádena. 

¡Nos leemos! 


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¿Cómo estáis? Yo creo que después de estar casi todo el día estudiando italiano, menos un ratito que he bajado con mi madre al supermercado...

Receta bizcocho de yogur de chocolate y pepitas.

13:19 Aran 4 Comments

¿Cómo estáis?
Yo creo que después de estar casi todo el día estudiando italiano, menos un ratito que he bajado con mi madre al supermercado, he empezado a volverme loca. La cosa ha empeorado cuando ha llegado un momento en el cual ya no sabía si tenía que poner verbos en indicativo o conjuntivo en las frases. Esto dicho así puede parecer una cosa facilísima, pero no os fiéis del italiano y de sus dramas verbales. Ya sido tal el drama que me he quedado mirando los apuntes y me he dado cuenta de que el problema estaba en que el esquema de mi profesor me estaba liando más que aclarando. ¡GRAN DRAMA!

He cogido aire y he dejado a un lado el esquema del profesor. Me he tomado un poco de tiempo para bucear por internet y encontrar algo que me aclarara la cabeza, y finalmente me he hecho mi propio esquema. Ahora parece que he empezado a ver la luz. Pero no echemos las campanas al vuelo. Mañana podría ponerme a hacer los ejercicios de repaso y entrar en crisis de nuevo. Mañana os cuento.

Y ahora... ¡Vamos a los divertido!
Ayer por la tarde, mi madre me dijo que le apetecía un bizcocho, así que, nos pusimos manos a la obra, y como me gusta compartir mi sabiduría culinaria con todos vosotros, os dejo por aquí la receta. ¿Qué os parece?

            

Vayamos con la receta.
Ingrediente.
- un yogur de chocolate
- harina integral y harina normal.
- azúcar morena y azúcar blanca.
- pizca de sal.
- aceite de oliva suave.
- gasificante dos bolsas (16 gramos).
- tres huevos o cuatro si son pequeños.

Procedimiento.
1. Cogemos un yogur de chocolate y vaciamos su contenido en un bol. Lavamos el envase porque será la medida del resto de cosas que tenemos que echar para realizar el bizcocho.

2. Cogemos un bol grande y echamos los tres huevos, una medida de yogur llena de azúcar morena y pizca de sal, batimos bien.

3. Echamos en esa misma mezcla otro medida de yogur de azúcar blanca y una medida de aceite de oliva suave, batimos con energía.

4. En ese mismo bol añadimos el contenido del yogur que habíamos apartado y batimos, una vez integrado, añadimos 3 medidas de yogur llenas de harina, una integral y dos de la normal.

5. Si la harina está muy compacta, tamizarla antes de echarla al bol grande. Batimos muy bien, y añadimos el gasificante. Batimos hasta que la masa quede ligera y homogénea.

6. Dejamos reposar la masa unos diez minutos, si es mas tiempo mejor. Lo mínimo, 10 minutitos. Esto favorecerá la subida del bizcocho en el horno durante la cocción.

7. Mientras está reposando la masa, ponemos a precalentar el horno a 180 grados, y cogemos un molde y lo untamos de mantequilla y espolvoreamos un poco con harina para que al desmoldar no se pegue.

8. Una vez reposada la masa, metemos el bizcocho en su molde durante 30 minutos a 180 grados. El tiempo de cocción dependerá de vuestro horno. Así que yo miraría a los 10 minutos pinchando en la parte central con un cuchillo, si sale limpio ya está, si sale con masa, dejarlo más. Eso lo vais viendo vosotros.

9. Opcional: para los que queráis echar pepitas. Las pepitas las echamos a los 10 minutos que lleve el bizcocho dentro del horno, de esta manera el bizcocho no está aún cuajado del todo, pero tampoco demasiado blando para que las pepitas se nos vayan al fondo y se deshagan. Pero antes de echarlas en el bizcocho, pasar las pepitas por un poquito de harina en un bol, así les costará más bajar al fondo.

¡Y listo!

                         


Ahora os cuento mis elecciones personales que pueden cambiar dependiendo de vuestros gustos.
1. Azúcar: yo he utilizado morena y blanca porque no me gustan los bollos demasiado dulces, y de esta manera la morena equilibra el sabor. Pero podéis echar solamente blanca.
2. Harina: he elegido harina integral y normal porque la integral lo hace más digestivo y con fibra. Pero si solo tenéis la normal, no hay problema. Va a salir igual de bien.
3. Yogur: he usado el de chocolate, pero podéis usar el sabor que queráis, natural, de limón, de fresa, griego. No hay problema, depende de vuestro gusto.
4. Pepitas: yo quería que este en concreto fuera todo de chocolate, así que usé pepitas, pero podéis echar frutos secos.

Os aseguro que este bizcocho sale bueno con lo que elijáis, muy suave, esponjoso y nada pesado. Además, mucho más natural y sano que cualquier bollerías comprada. Si os animáis a hacerlo, enseñadme fotos, y compartimos ideas.

Un besote y espero vuestros comentarios.



P.d: se me ha borrado la entrada dos veces y he tenido que reescribirla entera,  solo por el estrés, me merezco un comentario :(

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¡Buenas tardes! ¿Qué tal vais? Pues estaba estos días pensando qué contaros, con qué actualizar... y mientras me dedicaba a ello, m...

Mi paso por el restaurante "La Pepita"

18:58 Aran 0 Comments



¡Buenas tardes! ¿Qué tal vais?

Pues estaba estos días pensando qué contaros, con qué actualizar... y mientras me dedicaba a ello, me quedé mirando las fotos que tengo en la memoria del teléfono y me di cuenta que he ido a un montón de sitios que no os he contado por aquí. Así que, qué mejor que tirar de visitas a sitios geniales.

En esta ocasión os hablo del restaurante/hamburguesería: La Pepita
Llevaba mucho tiempo leyendo reseñas sobre gente que había ido y babeando con las hamburguesas que subían a su facebook, y quería ir a ver si de verdad eran como mostraban y para crearme mi propia opinión. 




Lo conseguí en una de las visitas veraniegas de Selene. No sabíamos dónde comer aquel día, y como era viernes, podíamos ir a probar los menús del día de algunos sitios que tenía en mi lista. Así que nos decidimos a ir. Se encuentra en la calle Alonso Cano, 103. Se llega muy bien con el metro. 
Nosotras fuimos, creo, desde el metro Alonso Cano, línea 1, pero mirando ahora el mapa, igual pilla mejor desde Nuevos Ministerios. Probaré la siguiente vez que vaya y os cuento. 

Nada más entrar, me gustó mucho la decoración, es tipo industrial. Os dejo algunas fotos para que juzguéis vosotros mismos. Al menos este local es muy espacioso y como fuimos pronto, no había agobio de gente. Pero a pesar de ser viernes, y de ir llegando gente cada poco, se estuvo muy bien. 




Me gustó sobre todo, el "skyline" que tenían en la pared donde se encontraba una especie de mesa corrida con sillas altas. Se veía a la perfección la silueta de los edificios más llamativos de Madrid. (Gracias a Selene y su teléfono, que fueron los que lograron sacar una foto en condiciones de ello).


 ¿No os parece genial? 

Los camareros que nos atendieron, un chico primero y una chica después, fueron muy amables y correctos en todo momento. Nos dieron a elegir entre el menú del día, explicándonos las hamburguesas que entraban de la carta en él, y dejándonos también la carta por si el menú del día no nos convencía. 

Aquí os dejo la foto del menú del día de aquel día (valga la redundancia). Podías elegir entre unas cuantas hamburguesas que ellos te decían de la carta o los Huevos Camperos. Y luego, entre los tres postres que venían en el menú, más la bebida. Os puedo asegurar que la hamburguesa llena bastante y no se echa en falta un primero y un segundo, así que, me parece adecuado un plato principal y un postre, por 12.50. Además, estas hamburguesas no tienen absolutamente nada que ver con las de las cadenas de fast food, os lo puedo asegurar. 



También hice una foto al mantelito que te ponen, donde te explican los tipos de carnes con las que hacen sus hamburguesas, los tipos de panes, las patatas, las salsas y el menú infantil. Siento la calidad de la foto...




Nosotras finalmente no elegimos el menú, aunque las hamburguesas que entraban en él sonaban maravillosamente bien, pero nos enamoraron otras que no estaban dentro. Así que, como un día es un día, y no sabíamos cuando volveríamos, queríamos probarlas y llevarnos un buen recuerdo. 

Selene se pidió la Pepita Sorrentina, que así es como llaman a sus hamburguesas. En concreto estaba compuesta por: Burger de ternera, rúcula, mozzarella fresca, orégano, tomate seco en aceite de oliva y cebolla crujienteOs dejo la imagen para que podáis empezar a babear sobre vuestros teclados, porque esta Pepita lo merece. 



Yo, por mi lado, estuve un largo rato decidiendo, porque había tantas donde elegir, que no era capaz de decantarme por una. Finalmente fue por la Pepita Pampera. ¡Qué cosa más espectacular! La elegí por la salsa, porque me encanta el sabor de la chimichurri.
Sus ingredientes eran: Burger de ternera, queso provolone, chimichurri, lechuga, tomate y cebolla roja en pan artesano

Como veis, cada hamburguesa lleva un pan concreto, dependiendo de sus ingredientes. 

Para compartir, pedimos unas patatas. Estaban muy ricas y crujientes, se nota que no son congeladas, sino que las hacen ellos allí en el momento. 



¿Qué os parece? La visita, ya os digo, que valió mucho la pena y aunque pedimos fuera del menú del día, no se me hizo muy caro, la verdad. Ahora mismo no recuerdo concretamente el precio, pero no más de 7-7.50 por las hamburguesas que nosotras elegimos. 

¿Os he despertado el gusanillo? La próxima vez, quizá me decante por el menú y así os cuento si hay mucha diferencia entre las hamburguesas del menú y las de la carta. 


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¡Hola, bebedores de té! ¿Cómo ha ido el finde? Yo he tenido visita en casa, invité a cenar y dormir a mi amiga Nat, que andaba un poqui...

Crónica fin de semana: Requisitos para ser una persona normal.

20:54 Aran 2 Comments


¡Hola, bebedores de té! ¿Cómo ha ido el finde?
Yo he tenido visita en casa, invité a cenar y dormir a mi amiga Nat, que andaba un poquito de bajón y así, se distraía. Habíamos hablado de ver alguna película después de cenar... pero no se nos ocurría ninguna. Hasta que a mi cerebro llegó un ¡clic! Me acordé de la película que había dirigido Leticia Dolera: "Requisitos para ser una persona normal", y aunque no sabía muy bien de que iba, ni había visto el tráiler, por lo que me cerebro recordaba, era cómica. Suficiente. Había que elegir algo ligero, dinámico y con humor.

Si un día estáis algo apáticos, aburridos o simplemente solo queréis pasar un buen rato viendo una película, os la recomiendo. Solo hay que ver el cartel para saber que hay algo divertido en ella.


No es la octava maravilla, pero yo soy de las personas que creen que no todas las películas sirven para todos los momentos, y que en ocasiones, es necesario tener este tipo de películas más livianas para divertirte un rato y dar alguna carcajada. 


Tiene escenas muy absurdas, otras algo más "intensas" y otras, pueden llegar a hacerte sentir un poco identificada con la protagonista. 

Nat y yo coincidimos en que en algunos momentos, sobre todo por la música, nos recordaba a Juno. 



Pasamos 90 minutos muy entretenidas y la verdad, creo que la voy a meter en mi cajón de películas para ver cuando necesito olvidarme de todo y pasar un buen rato. 
Además, el chico que hace de Borja, que no lo había visto antes en ninguna película o serie, me gustó mucho, la mitad de las carcajadas me las arrancó él. 

Para los que no la hayáis visto, os dejo una pequeña sinopsis sacada de la página web de la película:
María de las Montañas es una chica de 30 años un tanto peculiar y con un objetivo: convertirse en una persona normal. Para ello, elabora una lista con los requisitos fundamentales para serlo, se da cuenta de que no cumple ninguno de ellos y se propone hacer todo lo posible para cumplirlos.


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